Otras veces, en cambio, lo que haces es comprar algo que no funciona, y te arrepientes de haberlo hecho el resto de tus días. El típico cacharro que en la tienda te parece maravilloso, pero que al día siguiente de que te lo lleven a casa, sabes que has tirado el dinero. Suele suceder con cualquier aparato para hacer gimnasia, que se lo regalas a alguien al cabo de un año, tras haberlo usado tres veces.
O después de que te pase algo así, claro:
Comprar con mala pata
martes, 4 de mayo de 2010
Etiquetas: creatividad, deporte, humor
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1 comentarios:
joe pobrecillo jajaja mola mucho! x eso odio las cosas esas...¬¬
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