En la preciosa isla de El Hierro, en el paraíso de las islas Canarias se está produciendo un hecho pasmoso: la Tierra nos da muestras de que, a pesar de nuestros esfuerzos por matarla, sigue vivita y coleando. Tan viva que está pariendo lo que seguramente sea en el futuro un nuevo islote. De momento sólo vemos agua turbia y burbujeante, aunque bajo el mar surge la lava sin parar. Un montón de terremotos tienen asustadísimos a los vecinos de la zona (pobrecillos), aunque, como decía uno de ellos la semana pasada en la tele, si la naturaleza habla no queda más remedio que callarse y escuchar. El espectáculo es de primera, mirad:
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