No perdáis nunca la esperanza. Los malos, además de malos, son ruidosos, por lo que parece que en este mundo sólo hay desgracias, injusticias y penas, pero no es verdad. Hay millones de cosas bonitas por las que vivir. Hagamos entre todos mucho ruido de cosas buenas, para que tapen todo lo malo que ocurre y que tanto nos amarga.
Pensemos en nuestros niños y en construirles un mundo bueno en el que puedan vivir en paz. Es la herencia que les debemos dejar. Lo vamos a conseguir, tened esperanza.
Gracias Brownhorse, precioso vídeo.
Esperanza
lunes, 19 de diciembre de 2011
Etiquetas: humanidad
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